Somos ciudadanos alemanes de 1925

Investigadores expertos en antropología preguntaron como fue posible la indiferencia y facilidad en que la población civil alemana permitió el ascenso del tercer Reich con sus políticas genocidas. El "proyecto MK Ultra" permitía el adoctrinamiento del borregomatrix. Hitler fue votado democraticamente, en cambio Franco no fue votado. La ironía es ver como Hitler es odiado por la mayoría de alemanes y Franco es aclamado por los españoles, como consecuencia del proyecto "MK Ultra en España" (control mental social). España acepta la injustícia social, acepta la diferencia de clases, acepta el neoliberalismo, acepta el nuevo orden mundial, acepta el gobierno corrupto, acepta la marginación del tercer mundo, acepta la guerra de oriente, acepta el individualismo por encima del colectivo, acepta el materialismo como medio de felicidad, acepta los falsos ídolos como centro del mundo ideal, acepta la indecencia más vulgar para dar razón a su própio ser.
La diferencia entre los dos conceptos es sobbretodo la brutalidad en la violencia ejercida anteriormente y la capacidad de información que tenemos ahora para darnos cuenta de la verdad, por lo demás estamos justamente ahí, en el ejemplo de la Alemania de 1925.