THE AL FALUYA SIMBOL, I LOVE FALUYA

La Terra es una página escrita sin ánimo de lucro y esta producida de forma poco corregida tanto a nivel gramatical como estructural porque no me gano la vida con ello y para mi debe ser un trabajo que resulte poco esforzoso y sea más un acto cómodo para mi. También tengo presente que dentro de la poca profesionalidad siento la responsanilidad de ir siempre más allá en los temas dando ideas originales y que se fundamentan en años de estudio y comprensión.
La disciplina a la que dedico casi todo mi tiempo es la antropología,

La antropología estudia todo aquello en lo que interviene el ser humano, una disciplina muy viva y en contínua evolución. Intenta sobretodo dar forma real o lógica a muchas disciplinas especializadas y aisladas sin conexión aparente. La antropología se nutre de todas las disciplinas especializadas y gracias a las conexiones que puede identificar es capaz de cambiar creencias infundadas con gran objetividad. Se fundamenta en el intentar comprender sobretodo un grado y una posición científica a los paradigmas que no se comprenden y que crean desigualdades en todos los niveles. Sabemos que toda información debe ser estudiada y analizada con objetividad con una mirada crítica. 

Entiendo que mi forma chabacana para expresarme delata mi posición como ciudadano ordinario de Barcelomatrix, pero me da igual, creo que la expresión de las ideas originales son algo importantísimo, otras no son originales mias y por eso un día debré de poner un artículo con algunas de mis fuentes para que cada uno puedas hacer sus averiguaciones si lo desea, aunque ya tengo algunos blogs muy interesantes en la parte derecha arriba del blog de la Terra.
Un ejemplo de idea original de la Terra, algo que no puedo comprobar pero que me guardo el derecho de compartir de forma especulativa y de forma exclusiva, no sé si ha salido en algún medio, es lo que comenté en un artículo sobre que Irak fue invadido realmente por el hecho de poseer los restos de Babilonia y Sumeria, luego (cómo por arte de mágia) vi al periodista británico Chris Everard dando peso a mis conclusiones.

Vemos ejemplos, para quien quiere verlos, de profesionales especializados como muchos periodistas, que reconocen publicamente su monumental equivocación e insensibilidad hacia la profesión y por por la audiencia.